
FALLECE EL DIRECTOR Y PRODUCTOR VALENCIANO CARLOS PASTOR
Ha fallecido el productor, director y guionista Carlos Pastor, un auténtico todoterreno del audiovisual valenciano que desarrolló su carrera a lo largo de cuatro décadas, desempeñando diferentes funciones en el ámbito audiovisual.
Nacido en València, en 1949, inició su trayectoria como director en los años ochenta, con cortometrajes como “Makoki” (1982) o “La estela dorada” (1989). En 1996 debuta en el largometraje con la comedia “Una piraña en el bidé”, que obtuvo el premio a mejor película en la Mostra de València-Cinema del Mediterrani de 1996. Posteriormente rueda “A ras de suelo” (2005), un drama por el que la actriz Rosana Pastor gana el premio a mejor actriz en Mostra de València. Su tercera película, “Bestezuelas”, fue un thriller con ecos del cine quinqui y toques de humor que se presenta en los festivales de Bogotá o El Cairo, y que se alza con el premio del público en la sección Panorama Mediterráneo de Mostra de València 2010. En 2013 realiza “En el umbral de la conciencia”, un documental sobre un equipo de rodaje en busca de los secretos de los chamanes peruanos. En la actualidad preparaba un nuevo largometraje titulado “Destino perdido”, basado en un guion escrito en colaboración con Michel Gaztambide y Joan Álvarez.
En paralelo a su trayectoria estrictamente cinematográfica, el versátil cineasta desarrolla también proyectos como las TVmovies “Camps de maduixes” (2005), “Latidos” (2006) o “Comida para gatos” (2008), también premiada en la Mostra. Además, produjo y dirigió diferentes programas y series de televisión, numerosos spots publicitarios, filmaciones de montajes teatrales de La Fura dels Baus, Comediants o Els Joglars.
Pastor es uno de los principales representantes de una generación que luchó contra viento y marea por poner en pie un cine valenciano que se enfrentó con unas infraestructuras industriales frágiles y una difícil proyección exterior, pero logró consolidarse a nivel profesional combinando el trabajo televisivo con el cinematográfico.
Foto: José García Poveda